miércoles, 4 de noviembre de 2009

Pensamientos sueltos

Pocos son los objetivos que quiero alcanzar cuando tenga el poder que te da un cargo público: por ejemplo, quiero que haya paz y justicia social, quiero cumplir con las promesas que haré durante mi campaña sin tener que mentir y finalmente quiero ser un funcionario honesto y no dejarme corromper por nada ni por nadie.
Conclusión: nunca podré ser político.

Alberto Raso.

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