miércoles, 4 de noviembre de 2009

El extraño caso del Doctor Pito

* Basado en un cuento corto de Edgar Alan Poe de la serie “Narraciones extraordinarias de terror”.
Fiel a mi estilo este cuento está basado en “El extraño caso del Doctor Waldemar”.
El doctor del pito no nació en Curuzú Cuatiá sino que lo adoptó como lugar de origen, o sino es al revés, Curuzú cansado de que el señor del pito ande deambulando de aquí para allá, lo adoptó a él (Sin saber los peligros que significaba adoptar un personaje tan tenebroso y peligroso como el doctor del pito).
El doctor del pito pasó su primera adolescencia en una calle larga que baja y se pierde muy cerca de los arrabales t por supuesto se rodeó de amigos tan peligrosos como él. De esa su primera adolescencia poco o nada voy a decir; solamente que el doctor del pito, tal como Waldemar, tenía todos los vicios habidos y por haber, era timbero, burrero, mujeriego y se juntaba con personajes de su calaña, como yo, por ejemplo.
De su segunda infancia (que aún le dura) es de la que quiero hablar porque es la que nos compete a todos. Extrañamente, el Doctor Pito entra al Colegio Nacional y empieza a destacarse como un buen alumno por la inteligencia innata que tienen este tipo de personajes maquiavélicos y maléficos. Su estatura no es alta, pero tampoco es un enano, su voz no es clara pero a veces se entiende (especialmente cuando no está en pedo), no es judío pero mantiene grandes discusiones con los turcos (especialmente cuando hablan de caballos). Cuando se pone eufórico empieza a cantar y su canto parece un relincho. Es gente de campo pero odia los campos fértiles.
El señor del pito se viste a veces de traje gris o saco azul y otras veces se viste de vaquero y mocasines o alpargatas, da toda la impresión de que quiere despistar a la gente para que no conozcan su verdadera identidad psicótica. Otras veces este extraño señor del pito, se disfrazaba de gorila y otras de traje y corbata, ¡que extraño!
El señor del pito viaja constantemente pero inevitablemente vuelve a Curuzú (como Drácula que siempre vuelve a Transilvania). El señor del pito termina la secundaria y elige una carrera acorde con su maléfica personalidad, se transforma en un ave negra y allí empieza su eterno peregrinar por distintos lugares del planeta con un maletín donde lleva los elementos de tortura que va a emplear diariamente, con ellos planea cómo ejecutar a la gente, pero también lleva otro instrumento de ejecución, en una maleta más grande y que curiosamente parece un estuche de guitarra.
El doctor del pito vuelve como siempre a Curuzú y como por arte de magia su personalidad cambia radicalmente (parecería que alguien le hizo un gualicho) y empieza a ayudar en todo lo que puede a sus amigos, festeja mis cumpleaños como si fuera el suyo, muere y renace como el Ave Fénix junto con algún otro amigo, se dedica a la música y al canto (pero no tanto), se emborracha solamente los sábados y domingos (y lunes, martes, miércoles, jueves, y viernes). Se preocupa por la salud de los amigos y siempre está (mamado) cuando uno lo necesita, pero está. Cuida a sus mujeres tanto como a él mismo, cultiva su físico practicando paddle y otras actividades, y aguanta pesas de día y vasos de noche. Organiza todas las fiestas que puede y es uno de nuestros grandes amigos.

Para Papi con el amor de siempre.

Familia Raso Montes – Tatín –

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