lunes, 21 de septiembre de 2009

Reflexiones y otras cuestiones sobre Malvinas


Preguntas y Respuestas

¿Qué fue Malvinas?
Contestación: Malvinas fue una matanza estéril producto de los caprichos de un dictador borracho, inútil, prepotente y soberbio con deseos de perpetuarse en el poder y aliado de las potencias imperialistas que siempre nos ha sojuzgado de alguna manera, si no pueden por la razón, lo harán por la fuerza y por si ello fallara callarán y taparán la boca con dinero a políticos corruptos.
¿Qué creyó la junta militar?
Contestación: La “gloriosa” junta militar, creyó que no vendrían los ingleses? Sólo un loco podría pensar que los ingleses no vendrían, porque lo hicieron en las invasiones inglesas en goletas y fragatas de vela, como no lo harían ahora con las tecnologías más modernas y con el apoyo incondicional de sus socios de siempre, los EEUU y todas las potencias colonialistas.
¿Por qué la Argentina no aceptó la ayuda de la aviación peruana, la de Kadhaffi, ni la de Rusia, cosa que podría haber cambiado el rumbo de la guerra?
Contestación: Porque la soberbia brutal propia de los argentinos en general y su egocentrismo no lo permitía.
¿Por qué los políticos apoyaron en pleno la toma de Malvinas cuando sabían que la guerra estaba perdida de antemano?
Contestación: porque salvo excepciones los políticos quedan bien con Dios y con el Diablo y no le convenía quedar bien con Dios y sí con el Diablo encarnado en Galtieri and company.
¿Por qué el glorioso general Menéndez, hijo de generales de rango abolengo dijo que “venga el principito” en un rapto de soberbia brutal pocas veces realizadas en el mundo?
Contestación: Porque el general Menéndez, siempre fue un general de escritorio, que sólo servía para hacer equitación entre las damas de sociedad y además un cobarde que se rindió al escuchar el primer tiro.
¿Por qué sabiendo Galtieri de la presencia de submarinos atómicos tanto ingleses como norteamericanos mandó directamente a una muerte segura a miles de inocentes en el crucero “Ara” General Belgrano?
La respuesta es simple: Porque la junta militar le convenía que Argentina perdiera la guerra, ya que estaban convencidos de que finalmente EEUU sería un aliado de Argentina, ya que seis meses antes Galtieri estuvo dando cursos en West Point y le prometieron el oro y el moro y el idiota lo creyó.
¿Por qué no andaban los cañones, y las balas y vestimentas no eran las adecuadas, y los famosos mirage no andaban y de los pocos misiles solamente explotaban algunos?
Contestación: Los cañones argentinos no tenían los proyectiles que correspondían, los fusiles fal eran rezagos obsoletos de la segunda guerra mundial, que fueron vendidos como chatarra por Francia y otros países, al igual que los fap y los mirages.
¿Por qué los medios de comunicación nos mentían alevosamente diciéndonos que ganábamos dos a cero cuando en realidad perdíamos diez a uno?
Contestación: Los medios de comunicación nos mentían de tal manera porque respondían a sus mandos naturales y Kasanseuv y otros no eran distintos a todos los periodistas que conocemos.
¿Por qué hundimos al Sheffield en medio de la confusión general del nuevo comandante Salt lo cual hizo que el buque insignia, el portaaviones “invisible” sin la escolta de uno de los buques más importantes de la marina pirata?
Contestación: Gracias a la destreza y valentía de los pilotos de los nuevos aviones Super Etendart que montaron un misil apelando al ingenio argentino y volando a gran altura, que cayó justamente a las diez de la mañana hora en que los “piratas” toman el té, según la tradición de la marina inglesa. El capitán Salt sólo tuvo tiempo de decir “pónganse a cubierto”. El buque inglés Glamortgan fue la última víctima de los exocet.
¿Por qué dejamos llegar la flota pirata hasta que nos ahogó en un cerco muy difícil de salir y sabiendo que la suerte estaba hechada?
Contestación: No la tiene y si así fuera es relativa, quizá teníamos confianza en nuestros bravos correntinos, que murieron con honor, defendiendo un ideal, ideal que nos legaron nuestros mayores y que hoy ya está pasado de moda.
¿Sabremos alguna vez cuántos muertos y desaparecidos hubo y dónde están sus restos?
Contestación: Todos, absolutamente todos están en lo más profundo de nuestros corazones y el lugar que le corresponde por derecho propio, el cielo.
¿Por qué todo lo recaudado para Malvinas, incluyendo las cosas y abrigos que tejieron, abuelas, madres y padres nunca llegaron a Malvinas y se vendieron en remates públicos y hasta en kioscos, y por qué los correntinos, chaqueños fueron al frente y casi todos los chicos de Bs. As. con raras excepciones quedaron atrás de alguna máquina de escribir o alguna computadora?
No tengo respuesta para tal pregunta: sólo sé que fueron héroes y que nunca fueron reconocidos aunque dieron su vida por la patria y no entiendo por qué el capitán del BIN 5, de Caa Caty, que nunca se rindió ni después de terminada la contienda, fue condecorado por los EEUU por su valor en combate, tampoco entiendo como no fueron debidamente reconocidos los chicos del grupo albatros, los comandos especiales, la marina argentina y los muchachos del BIN 5 y 4 y los del ejército de infantería, ni tantos otros. Dios tiene la última palabra, pero yo condeno al mismo infierno que sufrieron estos héroes a la junta militar en pleno y a todos los políticos que apoyaron esta guerra suicida.
Y ahora me pregunto yo: ¿Qué pensará San Martín, Güemes, Artigas, Belgrano, J.J. Paso, Monteagudo, Rosas, el comandante Fontana y tantos otros que lucharon por la libertad de nuestra querida Argentina, ahogada por otras circunstancias y agradezco a Dios que hayan muerto, porque de lo contrario no podrían soportar tanta ignominia?

Alberto Raso y familia con el agradecimiento que corresponde a nuestros veteranos de Malvinas

Reflexión final
No reniego de todo lo dicho anteriormente, pero pienso que han pasado muchos años y que a todos estos veteranos le han quedado profundas marcas en el cuerpo y espíritu que no se borrarán jamás ni siquiera con el paso del tiempo, pero creo firmemente que es tiempo de olvidar viejas antinomias que jamás sirvieron para nada, salvo para reavivar rencores que no sirven hoy y por ello, en nombre del capitán Giacchino, y otros que mi memoria olvidó les digo y les pido con el corazón que haya paz en nuestra querida Argentina y me despido con un “Viva la Patria”.

Alberto Raso - Tatín -

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